La importancia de los abrazos a tu bebé
El tacto es uno de los sentidos más importantes que se desarrolla desde la fase embrionaria. Los abrazos son el primer medio de comunicación emocional que refuerza el vínculo entre madre e hijo.
En los primeros meses de vida, a través de la exploración táctil de su propio cuerpo y sobre todo, de las caricias y del contacto diario con la madre o con el padre, los bebés empiezan a ser conscientes de su propio ser físico. Pero además de la función que desempeña en la percepción física, el contacto físico es extremadamente importante en las relaciones emocionales.
La importancia del tacto en el vínculo entre padres e hijos.
La capacidad del recién nacido de percibir estímulos sensoriales y de absorber el significado emocional de los mismos es excepcional. Gracias al contacto piel con piel con la madre o el padre, se crea un nexo único entre ambos.
A los recién nacidos les chiflan las caricias y los abrazos.
No tengas miedo de pasarte con los achuchones. Prodigar abrazos a un recién nacido no es una mala costumbre; al revés: los mimos le aportan la sensación de confianza que los bebés necesitan.
Comunicarse con el bebé a través del masaje.
Masajear al bebé es una experiencia útil y estimulante además de emocional que permite a los papás comunicarse con su pequeño y ayudarle a experimentar el mundo exterior.
Es una antigua tradición en muchas culturas y se considera el lenguaje no verbal más comprensible para el recién nacido, además de una forma de estimular la identificación temprana de necesidades físicas y emocionales, y de establecer un nexo especial e irrompible entre madre/padre e hijo.