Maternidad y vuelta al trabajo, cómo gestionar el sentimiento de culpa
Consejos para volver al trabajo con tranquilidad
Maternidad y vuelta al trabajo, sentimiento de culpa
Uno de los momentos en los que una madre siente un fuerte sentimiento de culpa es la vuelta al trabajo tras la maternidad. Este sentimiento aparece tanto si este momento es esperado y deseado, o una necesidad que puede posponerse con gusto. Ahora veamos cuáles son las causas y cómo deshacerse del sentimiento de culpa con algunos consejos prácticos del psicólogo.
¿Cuáles son las causas de la culpa hacia los niños?
Nuevos interrogantes se suman a los ya presentes en la cabeza de una madre, que se pregunta si el niño/a es demasiado pequeño para quedarse sin ella, si estará bien y si el tiempo que le quita de estar junto tendrá consecuencias en sus vivencias emocionales. Además, los ritmos excesivamente frenéticos de la sociedad actual que invitan a la multitarea, elevan cada vez más el listón hacia la multitud de cosas por hacer y la lucha contra el tiempo disponible, alimentando el cansancio y la sensación de no llegar a todo. Una madre trabajadora debe garantizar profesionalidad, presencia y eficiencia. En el hogar debe ser igualmente centrada, cariñosa y presente.
Mamá y trabajo: equilibrio con sentido del deber
En este tejido cultural y social se da casi por sentado que en la madre aparece el pensamiento de “nunca ser suficiente”, especialmente cuando se compara con los ideales de una “buena madre” y respecto de los cuales se siente “falta de algo”.. Es importante conocer las expectativas sociales que se desarrollan en torno a la figura de la mujer/madre para no ser víctima de ellas. Algunas reflexiones ayudan a encontrar el equilibrio con el sentido del deber que acompaña la vuelta al trabajo: ser consciente de las responsabilidades asumidas y de su importancia para uno mismo y para los demás; encuentra el tiempo para escuchar tus emociones preguntándote si lo que "tengo que hacer" te hace sentir emocionalmente bien; redimensiona las preguntas de los demás y las propias.
Consejos prácticos para manejar la culpa
Aquí te dejamos algunos consejos para mamás primerizas, útiles para lidiar y manejar el sentimiento de culpa al regresar al trabajo:
Confía en la capacidad de adaptación de tu hijo: Los bebés tienen una gran adaptabilidad, si los ves llorar en el momento de la despedida, no será así todo el tiempo. Confía en que vivirán momentos de ocio y serenidad incluso sin tu presencia y que quienes los cuidan podrán consolarlos adecuadamente.
Acepta el cambio: date cuenta de que a veces las cosas no saldrán como las planeaste. El niño puede tener fiebre y requerir tu presencia, otras veces tendrás que quedarte más tiempo en el trabajo. Esto te permitirá desarrollar una actitud de no juzgarte a ti mismo, lo que te ayudará a no dejarte influenciar demasiado por el juicio de los demás.
Piensa con tiempo en quién cuidará a tu hijo cuando estés en el trabajo: elige la solución que te haga sentir más serena, si estás tranquila en delegar el cuidado de tu hijo, la vuelta al trabajo será más fácil de gestionar y te sentirás más segura.
Dedícale un tiempo exclusivo a tu bebé: a la vuelta del trabajo, abrázalo, bésalo, haz que el placer de encontrarse sea motivo de alegría y de felicidad.
Haz que el desapego sea gradual: primero pequeños momentos, luego intervalos cada vez más largos hasta llegar al tiempo que pasarás fuera de casa por trabajo. Ambos os adaptaréis a la ausencia del otro.
Revisa tu ideal como madre: acéptate, toma conciencia de tu valor, reduce las expectativas y deja de lado la idea de poder controlarlo todo.