Cómo escoger el calzado correcto
El calzado desempeña un papel crucial en el desarrollo fisiológico de los pies, de ahí la importancia de elegir el adecuado.
Los pies cumplen una función esencial en el desarrollo de los niños, que va mucho más allá de actuar como soporte del cuerpo en posición vertical. Los primeros años de vida son clave para evitar problemas en los pies en la edad adulta. Por ello es esencial calzar al pequeño con zapatos que respeten y favorezcan el desarrollo fisiológico del pie.
Un zapato para cada edad.
En cada fase de su crecimiento (nacimiento, gateo, primeros pasos), es esencial elegir un zapato adecuado que respete y favorezca el desarrollo fisiológico del pie y que estimule al pequeño a adquirir poco a poco una pisada correcta.
Cómo elegir bien la talla.
En lo relativo a la talla, los zapatos de bebé no deben comprimir ni limitar el pie de ninguna forma, sino dejar espacio suficiente.
Ten en cuenta que los pies del niño crecen rápido: tu pequeño aumentará varias tallas de media en el transcurso del año.
La regla que seguían nuestras abuelas sigue siendo válida: coloca el pulgar entre el dedo gordo del bebé y la punta del zapato y comprueba que hay espacio, de manera que el dedo no quede apretujado contra la punta del zapato.
Otro consejo es comprobar la talla del calzado del bebé cada tres meses pues el pie cambia continuamente.
Es mejor no usar zapatos usados.
Los especialistas en ortopedia pediátrica desaconsejan la práctica de heredar los zapatos de los hermanos pues basta llevarlos dos o tres meses para que el zapato tome la forma del pie, que no será la misma forma que la del bebé.
Por eso, lo mejor es comprarlos nuevos. Así que ya sabes: nada de heredar calzado usado a menos que sea para llevarlos en ocasiones muy puntuales.