Cómo quitar la costra láctea
Se trata de una erupción típica de los recién nacidos que suele desaparecer por sí sola. A continuación se ofrecen algunos consejos para fomentar la regresión.
La costra láctea es una erupción cutánea típica de los recién nacidos que aparece en los primeros meses de vida y tiende a resolverse de forma espontánea. Al no ser una enfermedad no se requiere ningún tipo de tratamiento, pero se pueden utilizar productos oleosos o cremas emolientes para ayudar a eliminar las escamas.
¿QUÉ ES LA COSTRA LÁCTEA?
La costra láctea es una alteración de la piel en los recién nacidos que puede manifestarse en los primeros 4-5 meses de vida con la aparición de escamas y costras grasas de color amarillento. Más correctamente llamada dermatitis seborreica, se localiza principalmente en el cuero cabelludo, extendiéndose a las cejas, la frente, los lados de la nariz, el mentón y la zona detrás de las orejas, pero también puede afectar a otras partes del cuerpo como los pliegues inguinales.
¿POR QUÉ SE FORMA LA COSTRA LÁCTEA EN LOS RECIÉN NACIDOS?
La dermatitis seborreica neonatal es una afección benigna y generalmente no molesta al bebé. Se debe a una sobreproducción de sebo, que se deposita en la piel y provoca la formación de escamas grasas que se adhieren a la piel. La causa subyacente no está clara, pero se supone que existe una conexión con las hormonas maternas que circulan en la sangre del bebé y que pueden estimular las glándulas sebáceas.
¿POR QUEÉ SE LLAMA COSTRA LÁCTEA?
La costra láctea se llama así porque antiguamente se pensaba que era causada por la leche materna. No es tan. Así como la mala higiene infantil, las infecciones, las intolerancias y las alergias han sido desacreditadas como factores responsables del trastorno.
CÓMO QUITAR LA COSTRA LÁCTEA
La dermatitis seborreica tiende a resolverse espontáneamente. Si tu bebé lo padece, aún puedes facilitar su regresión adoptando algunas medidas de cuidado de la piel.
- Cada 2-3 días lava tu cabello con un detergente a base de aceite o enriquecido con sustancias emolientes.
- Después del lavado, limpie la piel descamada con un algodón empapado en aceites vegetales, aceite de almendras, aceite de oliva por ejemplo, con una ligera fricción.
- También es bueno retirar las escamas ya desprendidas con peines o cepillos suaves, evitando frotar la piel para no irritarla más.