Bebés y partos prematuros
Cuando un nacimiento se adelanta: causas y los riesgos de partos prematuros.
Parto prematuro
El término bebe prematuro hace referencia a aquellos bebés que nacen antes de la semana 37 del embarazo.
Cuando se adelanta el parto ni el bebé ni la madre están preparados. Es un hecho traumático que afecta no solo al bebé sino a toda la familia.
No todos los partos pretérminos son iguales. Se dividen en 3 grupos: extremadamente prematuros (nacen antes de la semana 28 del embarazo), moderadamente prematuros (antes de la semana 32) y casi en término (entre la semana 34 y la 36). Obviamente cada día y semana que el bebé pasa dentro de la madre es fundamental para el desarrollo del bebé y las necesidades que requerirá el recién nacido serán diferentes.
¿Cuáles son las causas de parto prematuro?
Hay numerosas causas para que se produzca un parto prematuro y en ocasiones están relacionadas entre ellas. Hay tres tipos de causas: medicas, accidentales y ambientales.
Las causas médicas suelen deberse a causas relacionadas con el útero: malformación uterina, distensión uterina (especialmente en casos de embarazos múltiples), cuello del útero insuficientemente cerrado, desprendimiento de la placenta y la placenta previa pueden provocar un parto pretérmino, así como infecciones urinarias, diabetes y listeriosis.
En cuanto a las causas accidentales, son difíciles de definir, pero está claro que traumas como un golpe violento en el abdomen, una caída o una cirugía de emergencia puede provocar un nacimiento prematuro.
Finalmente, hay causas ambientales: numerosos estudios has demostrado una relación directa respecto algunas situaciones como la edad de la madre (demasiado joven o demasiado madura). Otros factores que se han identificado, son los trabajos al aire libre, las escaleras, caminar largas distancias, esfuerzos inusuales o extenuantes.
Riesgos y consecuencias para el bebé
Un parto prematuro impide que muchos órganos y sistemas del bebé alcancen la madurez fisiológica y todas las capacidades necesarias para afrontar el mundo fuera del útero. Nacer demasiado pronto podría implicar un mayor riesgo de disfunción orgánica, posibles enfermedades respiratorias, cardiovasculares, neurológicas, renales, oftalmológicas, nutricionales e inmunológicas.
Hoy en día, sin embargo, contamos con el conocimiento de neonatólogos expertos, enfermeras pediátricas especializadas en neonatología y equipos de cuidados intensivos neonatales que se dedican a ayudar para que estas pequeñas vidas maduren completamente.
El desarrollo de los bebés prematuros
Antes de nada, cuando hablamos del crecimiento y desarrollo de un bebé prematuro, debemos tener en cuenta la diferencia entre la edad correcta y la edad real, es decir, la fecha presunta del parto y la fecha real de nacimiento pues es importante por diferentes motivos. Cuanto más temprana sea la edad gestacional, más aspectos de contención y cuidados deberán implantarse en las salas de terapia intensiva neonatal, desde los primeros momentos de vida para acompañar y apoyar su crecimiento y prevenir algunas dificultades que pudieran aparecer posteriormente.
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