¿Qué razas de perros son adecuadas para los niños?

A continuación te hacemos algunas preguntas para que tú mismo sepas si estáis preparados para adoptar a un nuevo miembro en la familia:

¿Tengo tiempo suficiente para dedicárselo al perro?

Los cachorros son muy tiernos y te enamorarán a primera vista, pero requieren de mucha atención y dedicación de tiempo para educarlo y que se adapte a la familia. Tanto cachoros como perros ya amaestrados pueden ser un compañero de juegos ideal "para los niños", pero recordemos que será el adulto el responsable último de la gestión, las necesidades diarias y el compromiso con este nuevo miembro de la familia. No olvidemos que los perros tienen que salir mínimo entre 2/3 veces al día y dedicarles un paseo largo para que salgan, corran, hagan sus necesidades y desfoguen toda su energía.

¿Dónde se quedará y cuándo lo sacaré?

Es importante tener en cuenta el espacio y el tiempo que tendremos que dedicarle: el jardín no es imprescindible para que un perro esté tranquilo, pero cuanto mayor es el tamaño, mayor es el impulso necesario para cansarlo y dejarlo ventilar. Además de salir tres veces al día por necesidades, las razas deportivas o de caza necesitan mucha más actividad para cansarse. La regla de oro es que los perros cansados ​​son las mejores mascotas del mundo.

¿Qué edad tienen mis hijos?

Si es cierto que el perro es el mejor amigo del hombre, pero también es cierto que hay que educarlo en la posición de buen amigo. ¿Cómo? A través del respeto, con unas sencillas reglas de convivencia adecuadas a la edad de cada niño, que permitirán un crecimiento pacífico para todos. Por ejemplo: a los que asisten a la escuela primaria podemos asignarles la tarea de dar agua y golosinas, hacerles jugar con la pelota y ayudarnos en el manejo diario. Por otro lado, podemos dejar a un niño de guardería la honorable tarea de tenerlo con correa durante los paseos y enseñarle a respetar su espacio dejándolo solo cuando duerme en su cuco. Enseñaremos a los más pequeños a acariciarlo de la forma correcta, en el rostro y en el cuerpo sin tirar del pelo, de las orejas ni de la cola. Paradójicamente, los tamaños más grandes pueden ser más adecuados para los niños pequeños, ya que son más robustos, pacientes y menos sensibles a posibles burlas, mientras que los perros pequeños podrían lastimarse con mayor facilidad si se tiraran o sacudieran, pero al mismo tiempo el tamaño reducido los hace perfecto para ser llevado con correa por sus dueños.

¿Podré educarlo?

Independientemente de cualquier otro factor, saber educar a un perro es fundamental para la convivencia, e incluso puedes inscribirle en un curso de educación de cachorros para construir una buena relación con el cuadrúpedo y tener un perro obediente y equilibrado en el futuro. Unas pocas lecciones serán suficientes para tener excelentes resultados y también será una gran oportunidad para pasar horas al aire libre con una actividad que involucre a toda la familia. Los libros sobre cómo amaestrar perros según las edades y condiciones del animal serán también un buen aliado en esta etapa de adaptación.

Aclarados estos aspectos generales, llega el momento crucial: elegir la raza, pero ¿cuál se adapta mejor a vivir con niños? Suponiendo que no exista el perfecto, y que pertenecer a una raza en concreto o pedigree no quiere decir que sea mejor o peor perro, cada familia puede encontrar su perro ideal dependiendo de los gustos, tamaños y necesidades. Estos son las 5 razas más comunes:

• Golden Retrievers y sus primos Labrador Retrievers: son perros de tamaño mediano a grande (25-35 kg en la edad adulta). Muy pacientes y juguetones, son compañeros de juego incansables si se estimulan pero tranquilos cuando la situación lo requiere. Su origen como perros perdigueros explica muchas de sus actitudes: el amor por el agua y la natación, la pasión por llevar cualquier objeto que se les arroje y su morro suave muy especial. De hecho, al haber sido utilizados para devolver la caza a los cazadores en el agua, fueron seleccionados por la capacidad de "tomar" en la boca sin apretar. Ver para creer: dale un huevo a un Dorado y lo mantendrá entre sus mandíbulas sin romperlo. Es bueno saberlo, cuando vea que su hijo se mete el dedo entre los dientes.
• Caniche: raza francesa de origen antiguo y aristocrático. Son animales vivaces y alegres, caracterizados por un agradable paso al trote. El caniche existe en 4 tamaños para satisfacer cualquier gusto. El gigante alcanza los 60 cm por 20 kg de peso, es un perro increíblemente tranquilo y equilibrado que se adapta bien a la vida con niños. El mediano tiene un peso que ronda los 10 kilos lo que lo hace más compatible con la vida en casa, manteniendo las mismas características del primo mayor. El caniche enano (6 kg) y el juguete (menos de 3,5 kg) son ahora los más famosos y demandados debido a su tamaño muy práctico, pero la creciente popularidad ha llevado a algunos criadores a apareamientos imprudentes, por lo que siempre debes estar bien informado sobre el origen de la cachorro para evitar ser sujetos histéricos, neuriles y ladradores. Todos los perros sin hogar aman la compañía de los hombres hasta tal punto que suelen sufrir ansiedad por separación, por lo que no son recomendables si por motivos laborales piensas dejarlos solos durante muchas horas. Por otro lado, su cabello rizado es hipoalergénico y no se cae, por lo que es muy adecuado para niños con alergias o para padres que no quieren encontrarse constantemente acumulando cabello.
• Bichón Boloñés: una dulce bolita de pelo blanco (3-4 kg) que por su afabilidad, amabilidad con los niños y sociabilidad puede considerarse la versión totalmente italiana del caniche. Incluso su cabello, que debe ser peinado y arreglado porque no se cae solo, se le parece mucho.
• Cavalier King Charles spaniel: sus dulces ojos en forma de almendra y su tamaño muy pequeño (8-10 kg por unos 35 cm) lo hacen verdaderamente irresistible. De naturaleza dócil y poco agresiva, es excepcional con los niños: confiable, amable y paciente, ¡es un perro siempre disponible para jugar y abrazar!
• Bulldog Francés: es el más pequeño de los Molosser (8-15 kg, increíblemente concentrado) y es inconfundible por su hocico aplanado, orejas grandes y estructura compacta que lo hacen tan único y querido. Amante de la familia y los niños, también es apta para los propietarios más ocupados porque su conformación física la hace poco tolerante al movimiento, a la que prefiere mucho la holgazanería en el sofá.